viernes, diciembre 01, 2006

Nada

Uno dos tres cuatro,
cierra la ventana que me entran las pesadillas,
cinco seis siete ocho,
quizás me la provoques tu,
niñata ingrata,
tres cuatro,
niñata,
cinco seis,
ingrata.
Se la sombra de quien un día fuiste y todo ira bien,
yo no te recordare y tu me olvidaras,
como esta escrito,
como TU lo escribiste,
sin miedo, sin alma, al olvido, todo, lo tuyo lo mío, lo de nadie.
Pero no calles, dile al eco que eres la mas inocente de las q culparon,
díselo, dile todas las mentiras que se pueda creer,
hasta la ultima, hasta que reviente.
La metadona alivia los dolores que tu creaste,
los q ya se inventaron, pero los peores dolores no se sufren,
se palpitan,
se palpitan por un corazón agrio, romo, negro.
El tuyo, lo recuerdas?,
lo pinte en la mesa de aquel pupitre,
cuando aun te miraba a los ojos,
cuando mi corazón no masticaba cristales,
cuando mi corazón no tenia agujetas de tanto quererte.
Nada de esto te sonara extraño,
eres la madre de todo,
de sentimientos, de miradas y de escalofríos.
Mísera de ti y sedienta de todo vagas como en penumbra por los sueños q volviste pesadilla.
Eran mis sueños, los míos y punto.
No te preocupes, no volveré a descorchar recuerdos reserva del "cuandoaunmebesabas".
Por que así, un día se hizo incendio de unas brasas,
por que así, un día te quise donde no había nada que querer.
Nada.

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