Dedicado a ti. Imbecil

Serás imbécil

Te lo digo a ti.

Con todas la palabras y la sonoridad de la ´m´ pulsiba.

Imbécil.

¿Crees que puedes actuar como actuar?
¿Crees que puedes hablar así?
¿Crees que puedes tratar así a la gente?

Te crees rey en tu minúsculo mundo. Haces, Deshaces, Dictas e Impones porque te crees con poder.

En tu minúsculo mundo todos somos inferiores, marionetas, peleles .¿No es así?.

Un enorme y gran agujero negro lo colapsa todo donde debería estar tu corazon.

Tu alma negra marchita lo que toca.
Cada palabra agosta los tímpanos.
Cada exhalación envilece el ambiente.
A cada paso se oscurece el sol.

Serás imbécil.

Pues te daré una mala noticia. Oh si, lo haré.

Cuando todo esto acabe. Que lo hará.

Estarás solo. Solo porque nadie te recordará con una sonrisa. Nadie. Nadie te podrá decir una sola buena palabra de ti. Nadie.

Cuando tu minúsculo mundo se acabe. Que se acabará.

Seras nada. una nada que nadie recordará, una nada que nada será.

Imbécil

Y el resto de nuestras vidas hubiese ido bien

Dientes dorados y una maldición para esta ciudad estaban todos en mi boca. Solo, Yo no se como consiguieron salir, cariño. Déjame volver a ser la mascota que era cuando nos conocimos. Yo era mas feliz que cuando no funcionaba mi mente. Y si tu me hubieses tomado como un gaviota toma el viento. Bueno, yo hubiese saltado desde mi árbol. Y hubiese bailado como el rey de las monstruosidades. Y el resto de nuestras vidas hubiese ido bien. Nuevo lenguaje cuando ves las rayas, suciedad. Espero que este bien cuando mueras, viejo y huesudo. EL amanecer rompe como un toro en la corrida. Nunca debería de a ver sido llamado, pero mi cabeza esta contra el muro y estoy solo. Y si tu me hubieses tomado como un gaviota toma el viento. Bueno, yo hubiese saltado desde mi árbol. Y hubiese bailado como el rey de las monstruosidades. Y el resto de nuestras vidas hubiese ido bien. Dios apremia a los panaderos en la noche en que se cortan los pulgares, y sangran hasta que sus bollos se fundan. Estoy buscando lo bueno de la vida, quizás este destinado a no encontrarlo nunca. Sin una verdad o sin un campo llameante, ¿seré demasiado tonto para mejorar?. Y si tu me hubieses tomado como un gaviota toma el viento. Bueno, hubiese bailado como el rey de las monstruosidades .Y el resto de nuestras vidas hubiese ido bien

Marionetas

Hoy quiero ser marioneta para poder abrazarte.

Ninguna marioneta sabe cuantas cuerdas dirigen sus gestos
hasta que un día las corta e inmovil, pero libre,
con la mirada las cuenta.

Que la vida iba en serio

"Que la vida iba en serio uno lo empieza a comprender más tarde
como todos los jóvenes, yo vine a llevarme la vida por delante.
Dejar huella quería y marcharme entre aplausos,
envejecer, morir, eran tan sólo las dimensiones del teatro.
Pero ha pasado el tiempo y la verdad desagradable asoma:
envejecer, morir, es el único argumento de la obra"

¿Qué harás?

A bastonazos en la lomera

Así me encontró la realidad

Que por mil lagrimitas que cuente

Como los caracoles

Tu solo te asomas cuando escampa

Por mis entrañas navegan carabelas de desolación

Por las tuyas de dudas, por las de él de traición

Créeme, yo lo haré por mi. No por ti

Por no volver a romper las palabras

Ni contar ecos en mi habitación

Ni buscar tus labios en otros labios

Ni tus besos en mis recuerdos

Pero tú...Tú no lo harás por ti.

Dios sabe que harás cuando te toque.

Cuando el paso que haya de darse se presente.

Cuando no quede más remedio

que mirarse a los ojos y contar verdades.

Tu serás viento de poniente, serás humo de silencio,

serás lirio de tormenta o susurro límpido.

Serás todo eso y más

pero seguirás sin ser tu.

Palabras y Sentimientos

A veces por mucho que escribamos no llegamos nunca a expresar lo que sentimos.

Gracias Leticia

“Las soluciones más simples siempre están delante de nuestros ojos,
pero nos esforzamos en buscarnos problemas.”

Leones y ciervos

Y ocurrió que un día se enfrentaron en singular batalla un ejército de leones comandado por un ciervo contra un ejército de ciervos cuyo líder era un león.

Cada líder arengaba fuerza o inteligencia a su regimiento. Un líder. Una estrategia. Y cuando comenzó la batalla, rugidos y bramidos se entrecortaban entre cornada, zarpazo y mordisco. Los sonidos secos de las astas golpeando y rompiendo huesos saciaba la sed del ejército de ciervos. Los leones por su parte degustaban y saboreaban cada bocado que daban, cada vez que sus afilados colmillos desgarraban una esquirla de carne era una pequeña victoria… y poco a poco, cuando la noche apremiaba y las titilantes estrellas salpicaban una noche negra como el azabache, una caterva de cuerpos se amontonaba en el campo de batalla. Diezmados los ejércitos. Resquebrajada la estrategia. Flaqueadas las fuerzas. Cada movimiento era más lento y pesado. Abruptamente sangrando las heridas. Cada líder entiende que esta guerra requiere sacrificios. Quizá demasiados. Pero por esta noche ya son suficientes. Un rugido. Un bramido. Y las tropas retroceden en su posición. Ni vencedores ni vencidos, sólo victimas y verdugos. Tal vez algún día termine la batalla, rezarán por ello. Aunque temen la llegada de ese día porque eso significará que un ejercito ha sido derrotado. Significará que un ejercito ha vencido. Solo uno.